Estamos agradecidos con nuestro Señor Jesucristo por darnos la oportunidad de compartir tiempos muy especiales. El día 11 de noviembre tuvimos la visita de nuestro apreciable Hno. Marcos Toribio del Tabernáculo de Atongo El Marques en el Estado de Querétaro la cual tuvo como propósito la preparación para el cierre del trabajo que responde al llamado por parte del ministerio apostólico a revisar las bases que sostienen nuestro caminar cristiano.

Tomando como bases las escrituras de San Juan 3:1 y 2ª de Corintios 3:5-6 y bajo el tema: “El Nuevo Nacimiento Es Mi Necesidad Hoy” nuestro hermano Marcos, comentó que este año 2018 fuimos convocados a pesarnos en el la Balanza de la Palabra” y esto nos hace regresar a reforzar nuestras bases, una de ellas es el nuevo nacimiento en nuestras vidas; ya que la maldad y el pecado ha ido en aumento por tal motivo debemos estar bien seguros de tener esta promesa. Asimismo, nos llevó a varios extractos en donde nuestro Hno. William Marrion Branham habla de la importancia de esta promesa, tales como: Es necesario volver a nacer, ¿Cómo puedo vencer?, Adopción, Un profeta apenado, Jubileo y Restauración.

Nuestro hermano Marcos enfatizó que esta promesa debe de ser eficaz en el ministerio, porque a su vez la iglesia debe de ser portadora de la misma; ya no es suficiente el tener las promesas en una manera intelectual, deben de ser una realidad en nuestras vidas. El enemigo nos hace pensar que ya estamos bien, que ya lo tenemos, pero eso no es suficiente, porque muchas veces no es que el diablo nos quite las promesas, es que nosotros mismos las descuidamos.

Nicodemo siendo un maestro de las escrituras fue reprendido por nuestro Señor Jesucristo y en este tiempo tanto el ministro como la Iglesia están siendo reprendidos ya que si no estamos al 100% con esta promesa no podremos avanzar en este tiempo. A lo largo de las edades mucha gente ha caído y eso ha sido a razón del descuido individual, la mundanidad se ha infiltrado en la Iglesia y por lo tanto debemos de romper toda cadena ya que Él nos llamó a vida eterna, una Iglesia viva no puede estar detenida; debe de ir hacia delante de promesa en promesa, eso es lo que la mantiene viva y eficaz, no se necesita el intelecto, se necesita de un avivamiento verdadero el cual nos va a sacar de esta tierra.

Al término de su predicación el Espíritu Santo se derramó en la audiencia, fue un tiempo tan especial que no cabe duda que la Iglesia ha sido fortalecida y está lista para continuar rumbo a la culminación de este trabajo.

Después del servicio se tuvo un tiempo de compañerismo con nuestro Hno. Marcos y su Familia que le acompañó y fueron testigos de este trabajo tan especial.

Agradecemos el apoyo de nuestro Hno. Alfredo González Domínguez, Apóstol del Señor Jesucristo por la visión que tiene para nuestra nación mexicana, a nuestro Pastor el Hno. Ángel G González Ruíz, por la planeación de estos trabajos, asimismo a nuestro Hno. Rafael Toribio Bárcenas, Pastor del Tabernáculo de Atongo del Marques por contribuir en el desarrollo de nuestra misión y a nuestro Hno. Marcos Toribio Bárcenas, por su tiempo y su entrega para este trabajo. Y muy especialmente a nuestro Señor Jesucristo, por darnos tiempos muy especiales.

Dios les bendiga.