Sábado 22 y Domingo 23 de agosto; Dios por su gracia nos permitió estar en el Tabernáculo de la Ciudad de México en nuestra primera fiesta de jubileo, entre los presentes, el Tabernáculo del Valle de México, Tabernáculo Tepito y la Misión de San Rafael, Morelos, Pastores de nuestras Iglesias hermanas y la Iglesia del Señor en la República Mexicana quien estaría presente en la transmisión del Evento.
Siendo nuestro Hno. Alfredo González Domínguez, quien diera apertura a este gran tiempo como lo fue hace diez años en el Centro Banamex de la Ciudad de México el 22 de agosto, posteriormente el día domingo fuimos bendecidos a través de la participación especial de nuestro Hno. Otniel González Ruiz, cerrando nuestro Hno. Alberto Gómez Velasco, para que esa unción a la que arribamos se lograra asentar en nuestros corazones, con gran jubilo y regocijo celebramos esta gran fiesta de Jubileo en la República Mexicana, donde cada creyente vivimos una experiencia única de ser protagonistas y beneficiarios de las promesas de Dios para este día; dando pauta al recorrido de esta poderosa unción por la república mexicana.
De allí inicia un viaje a través del tiempo, de la Iglesia del Señor en México y sabidos que el trabajo del equipo venezolano fue ligado a evangelismo, pero que esto prepararía el terreno para que arribara un tiempo Apostólico. Fue así que de 1956 hasta 1996 se cumplían 40 años y eso marcaba la apertura de un nuevo tiempo y el trabajo de comenzar a ordenar el ministerio y la Iglesia en México, para eso era necesario que Dios levantará y confirmará la presencia de ministerios Apostólicos y Dios levantó y vindicó el trabajo realizado por nuestro Hno. Alfredo González Domínguez como un Apóstol de Dios en nuestra Nación Mexicana y es en ese año 1996 cuando da inicio el establecimiento de la Iglesia del Señor en nuestro País.
Entonces miramos que de 1970 al año 2010 transcurren también 40 años y marcaba el inicio de un tiempo nuevo y el 22 de agosto de 2010. Dios abre un tiempo nuevo el cual llamamos la apertura de la Era Apostólica en México en donde se principia a cumplir Efesios 4:11-16.
Pero ahora de 1970 a 2020 se cumplen 50 años que marca un Jubileo en nuestro País para tener promesas mayores como lo es el Bautismo del Espíritu Santo que posiciona al creyente en el Cuerpo de Cristo que es un Sello en el corazón del creyente, El Sello de Dios.
Es por eso que a nivel nacional entramos a un tiempo muy fuerte de preparación, para ordenar nuestras vidas regresando a la Palabra, a la Santidad, la Oración, el ayuno la lectura de la Biblia y el Mensaje regresando a todas aquellas cosas que por descuidos habíamos perdido, jubileo nos demandaba tornar nuestros corazones a Dios, sabiendo que este tiempo de jubileo también abre un tiempo para la marca de la bestia y corremos gran peligro si no vemos lo que está en juego en este tiempo.
Agradecemos a Dios por permitirnos mirar sus promesas y su demanda hacia nosotros para lograr obtener ese Sello de Dios y ahora recorrer el País tocando la Trompeta del Jubileo hasta el último segundo de este año 2020.
Por José Antonio Tovar Castellanos
Apóstol de Nuestro Señor Jesucristo
Fotografía
Josué Morales