Entonces harás tocar fuertemente la trompeta en el mes séptimo a los diez días del mes; el día de la expiación haréis tocar la trompeta por toda vuestra tierra. Y santificaréis el año cincuenta, y pregonaréis libertad en la tierra a todos sus moradores; ese año os será de jubileo, y volveréis cada uno a vuestra posesión, y cada cual volverá a su familia. - Levítico 25:9 - 10
Somos privilegiados por el tiempo que Dios nos ha regalado este año 2020 y de ser anfitriones de la 9na fiesta de Jubileo, llevada a cabo los pasados días 12 y 13 de diciembre del presente año en el Tabernáculo de Los Cabos.
Inaugurado este hermoso tiempo el día sábado nuestro Pastor, el Hno. Mario De La Luz y llevando la bendita Palabra de Dios nuestro Hno. Rafael Toribio, Pastor del Tabernáculo de Atongo el Marqués, levantando las escrituras de San Lucas 4:16 y Levíticos 25:9-10. Predicando el tema: “Regresar”, levantando un recuento del tiempo que la Iglesia en México ha venido caminando desde el mes de febrero en aquella reunión ministerial donde la trompeta de liberación fue tocada por el Hno. Alfredo González, dando inicio al tiempo de Jubileo, el tiempo de regresar a lo que habíamos olvidado y regresar a la Palabra de Dios. Exhortándonos a regresar al principio: “Nos hemos retrasado muchísimo: ¿Y así queremos ver milagros? ¿Cuál es tu condición?”. Levantando que Dios nos había llevado a lo largo de las 8 fiestas anteriores por toda la República Mexicana y nos traía en la 9na. fiesta al límite de la tierra en Los Cabos, mencionando el tiempo límite al que ya hemos llegado. Hombres, jóvenes y mujeres fueron participes de este precioso encuentro cerrando nuestro primer servicio con una oración en cadena.
El día domingo 13, por la mañana, se daba la continuidad a este gran evento reunidos todos para honrar el nombre de nuestro Señor Jesucristo. Entonando suaves alabanzas, el Hno. Samuel García, Amichs García y Raquel González compartiendo cantos especiales, dando paso a la Palabra de Dios, predicada por el Hno. Alfredo González, Apóstol del Señor Jesucristo; levantando la escritura de San Lucas 4:16 e Isaías 61:1. Se nos hablaba de la importancia de haber llegado al límite que representa Los Cabos en el caminar de este trabajo. Indicando el tiempo en el que estamos viviendo y el venidero: “O te levantas con la marca de la bestia o te levantas con el Sello de Dios” llevándonos a una tranquilidad y silencio apacible, mientras el hermano Alfredo, se refería a Ruth como un tipo de la novia: Rut tomando una decisión, Rut trabajando, Rut descansando y Rut recompensada; marcando que la etapa en la que la Iglesia mexicana se encontraba es Rut Descansando.
Sin duda somos privilegiados de haber vivido este tiempo solemne y de ser testigos de lo que Dios trajo para el cierre de este trabajo. El Tabernáculo de Los Cabos ha sido bendecido a pesar de los obstáculos que durante la preparación se fueron presentando, y estamos agradecidos con Dios por la oportunidad haber formado parte del maravilloso plan y sus tiempos perfectos. Los saludamos en el nombre de nuestro Señor Jesucristo y que Dios los bendiga.
Hno. Aldair Valenzuela
Fotografía
Zulmy Gurrola y Aldair Valenzuela