Contando con la participación de alrededor de 110 jóvenes pertenecientes al centro de la República mexicana, estando presentes jóvenes del Distrito Federal, Edo. De México, Veracruz, Querétaro y Morelos. El día viernes por la mañana se dio la bienvenida recibiendo a los jóvenes en el desayuno, después se tuvo un momento de esparcimiento y de platica entre ellos; entonces las actividades de integración dieron comienzo con una serie de juegos los cuales consistieron en formar equipos de trabajo, se formaron 5 equipos, la primer actividad consistió en formar una telaraña con un madeja de estambre en la cual cada uno tenia que aprender el nombre de la persona, la procedencia y el objetivo de estar en la reunión y así sucesivamente.
En la segunda actividad se tenía que formar un mural en el cual se debía plasmar un mensaje de invitación hacia los jóvenes que no conocen de este mensaje de restauración, se noto una gran convivencia entre los jóvenes, los cuales estaban llenos de optimismo y alegría. El día culmino con un servicio de cantos y Testimonios.
El día sábado se tuvieron pláticas divididas por edades, los grupos quedaron de la siguiente manera: 12 a 17 años Hno. Augusto Pérez, 18 a 22 Hno. José Luis Trejo, 23 a 28 Hno. Eleazar Ponce, 28 en adelante Hno. Manuel de la Luz.
En la noche hubo un servicio el cual estuvo a cargo del Hno. Raúl Rodríguez, su tema hizo énfasis en que el joven debe de identificar y llegar a su posición, hablando un poco de cómo es que Dios le dio una posición al joven Adán en el huerto del Edén. Se pudo sentir una unción muy especial, los jóvenes pudieron rendirse ante su Creador, lágrimas corrían por sus mejillas, un derramamiento del Espíritu Santo estaba tomando lugar.
El día domingo las expectativas de los jóvenes contenían una gran necesidad por ser llenos de Dios, el esfuerzo de haber ido se vería recompensado con una gran bendición; el encargado de la predicación fue el Hno. Otniel González, el cual hablo acerca de la lucha que cada joven debe enfrentar por llegar a su posición espiritual dentro de este mensaje y de que ya es tiempo de conseguir ser verdaderos hijos de Dios. La atmósfera comenzaba a sentirse cada vez mas especial, todo se tornaba en levantamiento de manos, en lágrimas derramadas, todo a causa de que Dios estaba listo para derramar el gran regalo que tenía para sus jóvenes, entonces nuestro pastor toma el lugar para avivar aun más el fuego que ya se podía palpar, se preparó una línea de oración y los ministros solo pusieron sus manos sobre cada joven. Sin duda Dios visitó la vida de cada muchacho y de cada señorita.